Nuestros queridos políticos.

Honorabilidad, independencia y Podemos.

La semana que termina nos ha dejado en la alfombra política más de lo de siempre.

Dimisión de la señora Ana Mato, Ministra de Sanidad, por el asunto “Gürtel”. Sin comentarios…

El problema es,  ¿cómo llega esta señora a ser ministra?

¿Cómo es posible que ningún partido haya denunciado nunca a un miembro del mismo por corrupción?

¿Cómo es posible que la dirección de los partidos nunca detecte irregularidades?

El Sr. Rajoy ha defendido la honorabilidad de los políticos españoles, de los empresarios, de los sindicatos, de los trabajadores, de todos. La honorabilidad que debe defender es la de los políticos y la de los responsables sindicales que  día tras otro aparecen en los medios informativos por la actitud, de muchos  de ellos, poco honorable.

Y a continuación ha declarado que se van a aprobar “un montón” de medidas para impedirla, antes del mes de marzo.

Sr. Rajoy, es fácil acabar con la corrupción en los partidos. Subvenciones cero, donativos cero y un interventor que supervise los ingresos y los gastos, ajeno al partido. Y que los partidos vivan de las cuotas de sus afiliados.

El siguiente gran tema de la semana ha sido, como no podía ser de otra manera el Sr. Más. Este caballero aburre ya hasta a las piedras. Me gustaría saber a qué se debe tanto interés por la independencia, asunto que no llevaba ni en el programa electoral. El famoso referéndum, o lo que fuese, del 9 de noviembre dejo claro que son muchos más los catalanes que quieren seguir siendo españoles que los que no, pero él dedujo del resultado que el mandato de Cataluña era continuar con la hoja de ruta. Está claro que ni entiende a los niños y niñas andaluces, que son mucho más inteligentes y hablan mejor que él, que ni entiende el mensaje que los catalanes le dejaron el 9N. Empiezo a sospechar que entender, entender, entiende poco. Bueno, de algo sí que entiende…

La tercera gran noticia es que Podemos es un partido político. Partido político a la vieja usanza, su política económica lo delata y eso que todavía le van a hacer más retoques. Aumenta la “casta”. Los círculos se irán fundiendo hasta que quede uno solo y el centro será El Sr. Iglesias. ¡Al tiempo!

El folclore asambleario está a punto de ser liquidado.

La lluvia afortunadamente ha llegado y aunque no sirva para limpiar la corrupción convierte la atmósfera en más respirable.